Dicen que llegarás a mi vida
sin que casi lo note.
Dicen que no debo buscarte,
pues vendrás serenamente
hasta mí.
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Dicen también que no te espere,
que no te piense, que no te reclame.
Dicen...
que no te veré en noches de lunas de satén,
que tampoco harás tu aparición
en el azul lago de mi lugar en el mundo,
ni en el ocaso color mar.
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Dicen...
que no te sentiré en todas mis entrañas,
que no destellarán mis ojos al mirarte,
que no irrumpirá la magia ni la locura.
Dicen...
que mi cuerpo no se desvanecerá al tocarte,
que mi piel no gritará de sed,
que mi corazón no sentirá salirse.
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Sin embargo dicen...
que cuando llegues a mi vida,
sentiré la plenitud de la serenidad,
esperaré sin desvelos,
sonreiré con sinceridad,
despertaré sin sobresaltos.
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Dicen también...
que echarás raíces en mi cuerpo
anudándolo al tuyo y aún así
seguiré viviendo en libertad.
Dicen que serás...
abrazo fuerte en mi nostalgia,
agua fresca en mi ira,
inmensidad en mis límites,
seguridad en mis caídas.
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Dicen...
que llegarás sereno y calmo
hasta mi orilla
y que sin darme cuenta,
te abrazaré por siempre AMOR,
por siempre...
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ELGA CARAMELLI
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